Los gobiernos de Colombia y Estados Unidos se reunirán en marzo próximo en Washington, para tratar la cooperación en temas judiciales, entre ellos el proyecto de ley de sometimiento a la Justicia, según informó este martes el Embajador de Colombia en ese país, Luis Gilberto Murillo.
En entrevista con Colombia Hoy Radio, el Embajador Murillo dijo que se está “preparando la visita del señor Ministro de Justicia (Néstor Osuna), que será en la segunda semana de marzo, para discutir estos temas”.
“Ese proyecto ha sido de buen recibo acá, precisamente porque avanzamos también con el Departamento de Justicia de Estados Unidos en tener un grupo consultivo que dialogue, consulte, revise casos de extradición que pueden ser sensibles en el marco de la aplicación de la aplicación de la política de Paz Total”, declaro Murillo.
Y precisó que se creará un grupo de bilateral de cooperación en justicia. El Embajador destacó que “las relaciones están en muy buen punto y en estos seis meses se ha generado un gran acercamiento”, lo cual se refleja en las visitas de funcionarios de alto nivel, tanto a Colombia, como de Colombia a Estados Unidos.
Recordó que el Presidente Petro plantea “reformas profundas a la política de drogas”, ya que esta “ha sido inefectiva”. “Y allí estamos planteando nuevas herramientas: mayor interdicción fluvial y aérea” y “golpear los eslabones más duros de la cadena del narcotráfico, sobre todo haciendo mucho más sin control de lavado de activos”.
En cuanto a la preocupación de EE. UU. por el flujo de narcóticos, subrayó que “la lucha ha sido frontal desde el inicio de nuestro Gobierno”.
Agregó que “se ha confiscado un número muy importante, más de 200 toneladas de cocaína, en procesos de interdicción, y eso es una muestra de que seguimos precisamente con lucha frontal contra el narcotráfico”.
Anotó que las relaciones bilaterales se encuentran en un nuevo momento, “y hay que mandar nuevos énfasis en la relación bilateral entre Colombia los Estados Unidos”.
En ese sentido, indicó que uno de los principios es atacar frontalmente al narcotráfico “pero no a las comunidades que necesitan mayores oportunidades”.
