En Tibú, bajo un intenso calor, se vivió una tensión aún mayor que la que se vio en la televisión nacional durante la mesa de diálogos entre las disidencias del autodenominado Estado Mayor Central y el Gobierno de Gustavo Petro.
Esta tensión persistió hasta el último minuto, y hubo accidentes y desacuerdos que ocurrieron ante una multitud de al menos 5 mil personas congregadas en este municipio de Norte de Santander.
Según el acuerdo entre el Gobierno y el Estado Mayor Central (EMC) en Suárez, Cauca, se había planeado que el 8 de octubre comenzara tanto la mesa de diálogo como un cese bilateral de 10 meses a nivel nacional.
Sin embargo, durante las discusiones sobre los protocolos, surgieron desacuerdos que pusieron en duda la continuidad de la mesa de diálogo.
Representantes de diversas regiones subieron al escenario para exigir un cese del fuego, generando incertidumbre. El vocero de la guerrilla, Andrey Avendaño, se retiró de la tarima, aunque regresó más tarde y tuvo una discusión detrás del escenario con otro delegado.
Ver esta publicación en Instagram
Las comunidades culpan al Gobierno por la falta de un acuerdo y le recuerdan al presidente Gustavo Petro que llegó al poder gracias a movimientos sociales, advirtiendo que también podrían derrocarlo si no se logra un acuerdo.
“El día 16 de octubre de 2023 culminará la etapa exploratoria y de alistamiento, para dar inicio formalmente al proceso de diálogos de paz con la instalación de la mesa”, concluyeron.