El magnate no tuvo problema en compartir con su pequeño en este encuentro desde la sala oval de la Casa Blanca.
Elon Musk protagonizó un tierno y divertido momento con su hijo, justo en una importante reunión con el presidente Donald Trump en el despacho oval.
El empresario y su hijo X Æ A-Xii estuvieron presentes en la Casa Blanca, durante una reunión donde los temas más importantes fueron sobre DOGE, el departamento al que está a cargo.
Trump le otorgó mayores poderes para implementar recortes en la administración pública estadounidense. Musk lidera el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), que tiene como objetivo reducir costos y reformar la burocracia gubernamental.
Durante el evento, se firmó un decreto que ordena despidos masivos, limita nuevas contrataciones y prioriza la eliminación de programas considerados "no esenciales". Musk, reconocido por su estilo directo, advirtió sobre el riesgo de quiebra del país si no se controla el déficit fiscal, que actualmente supera los dos billones de dólares.
Aunque justificó las medidas como "de sentido común", las decisiones del DOGE han generado polémica, como el cierre de agencias y programas de inclusión, y múltiples denuncias de inconstitucionalidad. Además, las acciones del empresario han provocado suspensiones judiciales y críticas por posibles conflictos de interés debido a los contratos multimillonarios de su empresa SpaceX con el gobierno.
El acto no estuvo exento de momentos inusuales, con la presencia de X Æ A-Xii distrayendo ocasionalmente a su padre. Musk también lanzó acusaciones sin pruebas concretas sobre corrupción y despilfarro, citando casos anecdóticos como pensiones para personas supuestamente fallecidas hace décadas.
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