El homicidio de Jack Ramírez no solo indignó a Barranquilla, sino a todo el país al ver lo que sigue generando la delincuencia, quitándole la vida a personas inocentes.
Jack Ramírez Comas era un joven de 23 años; estudió ingeniería mecánica y vivía tranquilo. Pero el pasado 2 de noviembre, la delincuencia le quitó la vida.
El joven estaba parqueando el carro, pues iba a dejar a su novia en su casa. Pero otro carro salió de la nada y lo chocó. Cuando Jack se bajó a mirar lo sucedido, los hombres que iban en el otro automóvil se bajaron armados.
La despedida del perrito de Jack en el funeral:
Se notificó que los ladrones lo intimidaron tanto a él como a su novia, hasta el punto de obligarlos a bajar del carro donde se transportaban. Pero uno de los delincuentes decidió disparar a Jack Ramírez en la cabeza. Como lo detalló El Espectador.
Pese a que fue trasladado a urgencias, no pudo salvar su vida. Por eso su familia lamenta la situación y pide justicia para este joven que, además, era amante de los animales y por eso su perrito Orión lo despidió con un inolvidable gesto.
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La madre de Jack compartió una foto en sus redes, destacando que apenas Orión se bajó del carro, entró a la funeraria y llegó al salón donde se encontraba el ataúd del joven. El perrito subió sus patitas a la estructura, con la idea de despedirse de su fuel amigo y compañero.
El perrito esperaba día y noche a Jack en la puerta, por eso la familia decidió llevarlo al funeral para que se pudieran despedir, entre el dolor de esta noticia tan difícil.
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