La guerra que enfrenta el movimiento islamista Hamás contra Israel ha dejado una cifra impresionante de víctimas mortales y heridos. Pero también historias de muchas familias encerradas en el conflicto; ese el caso de la actriz Sarah Mintz, quien reside en Israel con su esposo e hijos.
La oriunda de Barranquilla cosechó una carrera exitosa en Telemundo, como una de las villanas más recordadas en la televisión latina, conocida como Maritza Rodríguez, su nombre de nacimiento. Pero desde hace unos años se unió en matrimonio con Joshua Mintz, un importante ejecutivo de televisión.
Juntos conforman una familia de admirar, al lado de sus gemelos y del amor que profesan por la religión judía. Incluso, hace 5 años, Martiza cambió su nombre y ahora es conocida como Sarah Mintz, pues se convirtió por completo al judaísmo y por eso se mudó a Israel.
La guerra que vive ese país es una situación muy complicada para la colombiana, por esa razón fue entrevistada en el programa ‘Día a Día’, donde comentó cómo han transcurrido estos días tan difíciles y hasta la manera en la que se resguardan en el edificio donde vive, cuando escuchan la alarma de misiles.
Sara Mintz explicó cómo son los refugios en su edificio en Israel:
Según comentó la actriz, actualmente vive en un edificio viejo en el centro de Jerusalén, por eso los refugios se encuentra abajo del lugar y es ahí donde deben acudir cuando se enciende la alarma de peligro.
“En los edificios más modernos, hay un cuarto que está con una puerta especial y ahí uno se puede proteger”, aseguró Sarah Mintz.
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Aunque también destacó que las personas deben acondicionar las zonas de refugios, cuartos o el búnker, con agua, alimentos y todo lo necesario para sobrevivir.
“Uno tiene un minuto y medio para salir corriendo cuando suena la alarma, porque en ese momento está interceptando el cohete, pero tenemos que quedarnos ahí unos 10 minutos. Por si no pasa nada, uno puede volver a salir”, explicó la colombiana, refiriéndose al protocolo que tiene Israel para anunciar los misiles y activar la reconocida Cúpula de Hierro, contra estos explosivos.
Pese a todo y el tiempo de guerra, entiende que la vida debe continuar, por eso sus hijos siguen en clase y hasta están en la preparación del Sabbat, siguiendo con las tradiciones judías.
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