Una hernia obligó a que el Papa Francisco tuviera que suspender sus labores y en las próximas horas lo intervendrán quirúrgicamente por una obstrucción intestinal.
El Sumo Pontífice comenzó a presentar complicaciones a comienzos de esta semana y acudió al Hospital Gemelli, de Roma (Italia), para realizarse varios exámenes, aunque no se establecieron los motivos de los mismos.
Durante estas revisiones le hicieron un TAC y allí encontraron esta complicación que ordenaron su inmediata hospitalización para hacerle la intervención de urgencia.
“Al comienzo de la tarde, se someterá a una operación quirúrgica de laparotomía y de cirugía plástica de la pared abdominal con prótesis, bajo anestesia general”, dijo Matteo Bruni, director del servicio de prensa de El Vaticano.
Este procedimiento tiene como objetivo abrir, explorar y examinar toda la zona abdominal para encontrar todos los inconvenientes que esté presentando el Papa.
“La operación, preparada estos últimos días por el equipo médico que asiste al Santo Padre, se ha vuelto necesaria a causa de una hernia incisional que provoca síndromes suboclusivos recurrentes, dolorosos y en vías de agravación”, manifestó Bruni.
El Papa, a sus 86 años, viene presentando múltiples complicaciones de salud y en la actualidad se moviliza en una silla de ruedas o con un bastón por un problema de rodilla.
La semana pasada debió suspender su agenda por unas dolencias físicas, de las cuales se recuperó rápidamente con tratamientos médicos.
En julio de 2021 lo operaron del colon, situación que lo llevó a su hospitalización por 10 días, intervención que el mismo Papa dijo, le dejó secuelas.
Pese a estos problemas de salud, el Papa Francisco señaló que no tiene previsto renunciar al liderazgo de la Iglesia Católica.
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